Menú y alimentación para bajar el colesterol Madrid
Dieta para bajar el colesterol con nutricionista
Vivimos en un mundo en constante movimiento y no nos paramos a atender a nuestra salud, sin embargo, resulta esencial recordar que cada elección que hacemos en nuestra alimentación puede ser un paso para mantener un corazón más sano y resistente. Por ello, presentamos nuestra dieta especializada para reducir el colesterol de la mano de un nutricionista.
Nutricionsita colegiado
Todos nuestros me dietistas están colegiados en el colegio de nutrición y dietetica de Madrid y debidamente acreditados.
Alimentación para bajar colesterol
Además de la dieta te explicaremos los alimentos perjudiciales que aumentan el colesterol y trigliceridos
Con cita previa
Consulta de nutrición y dietetica con cita previa, evitaras colas y esperas
Dieta y menú personalizado
Nuestras dietas para reducir el colesterol son totalmente personalizadas según cada paciente.
Déjanos tu teléfono, te llamaremos para concretar
Horario
Lunes a
Viernes
09:30h a 14:00h
16:30h a 20:00h
Sábados
10:00h a 13:00h
Alimentos para bajar el colesterol y trigliceridos
Es fundamental comprender la gran variedad de alimentos, así como sus probabilidades de nutrir tu cuerpo y fortalecer tu sistema cardiovascular. Permítenos guiarte a través de un amplio abanico de opciones que no solo satisfacen tu paladar, sino que aportar importantes beneficios para tu salud.
Alimentos en una dieta para bajar el colesterol
- Avenas y cereales integrales
- Aceite de oliva virgen extra:
- Pescado graso
- Frutas y verduras
- Nueces y semillas
Nutrición para reducir el colesterol
Alimentos con colesterol alto
Otro aspecto importante en nuestra dieta para reducir el colesterol es no comer aquellos alimentos que pueden elevar los niveles de colesterol. A continuación, exponemos algunos de los principales alimentos a evitar:
- Grasas transgenicas y saturadas: Alimentos procesados, fritos y comidas rápidas.
- Las carnes rojas: Estos alimentos no solo aumentan el colesterol LDL, se asocian a un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares.
- Productos lácteos enteros:Productos como la leche entera o los quesos grasos
- Azúcares y almidones refinados: Presentes en productos horneados, dulces y bebidas azucaradas,
Precios dieta para bajar el colesterol
1 consulta de nutrición
-
60 Minutos
-
Cita previa
Consultas de revisión
-
20/30 Minutos
-
Cita previa
5 consultas de nutrición
-
20/30 Minutos
-
Cita previa
¿Debo hacer ejercicio para complementar la dieta?
La práctica regular de actividad física no solo potencia los efectos positivos de una dieta para bajar colesterol, sino que también aporta beneficios que van más allá de la pérdida de peso.
Beneficios combinados:
Mientras que la dieta se enfoca en proporcionar los nutrientes necesarios y mantener un aporte calórico necesario, el ejercicio contribuye a mejorar la salud cardiovascular, aumentar el colesterol bueno y reducir los niveles de triglicéridos.
Control de peso:
El ejercicio es un aliado esencial en el control de peso. Complementar tu alimentación para bajar el colesterol con una actividad física regular ayuda a quemar calorías adicionales, siendo esencial para mantener un equilibrio energético y prevenir el aumento de peso.
Mejora de la resistencia cardiovascular:
Correr, nadar o andar en bicicleta, mejora la resistencia cardiovascular. Es decir, tu corazón se vuelve más eficiente bombeando sangre y los músculos que se emplean en estas actividades utilizan oxígeno de forma más efectiva. Mejorando de esta forma la eficiencia cardiovascular, esencial para una mejor salud a largo plazo del corazón.
Regulación de los niveles de azúcar en sangre:
La actividad física también tiene un papel importante en la regulación de los niveles de azúcar en la sangre. Siendo relevante para aquellas personas que muestren resistencia a la insulina o que padezcan diabetes tipo 2.
¿Con la dieta, tendré que pesar las raciones de los alimentos?
La gestión adecuada de las porciones es una tarea esencial para lograr una dieta exitosa que promueva un corazón saludable. Aunque no es necesario que te conviertas en un obsesivo de las mediciones, comprender y controlar las porciones contribuye potencialmente a mantener un equilibrio nutricional adecuado.
A continuación, te mostramos la importancia de ello.
Control de calorías:
Entender las porciones te permite tener un control más preciso sobre tu ingesta calórica. Mantener un equilibrio adecuado entre las calorías consumidas y las calorías quemadas resulta esencial para gestionar correctamente el peso, un factor crucial en la salud cardiovascular.
Prevención del sobrepeso:
Controlar estas porciones puede convertirse en una estrategia efectiva para prevenir el sobrepeso y bajar el colesterol. Las porciones moderadas evitan que haiga una ingesta calórica excesiva, un factor clave en el desarrollo de la obesidad, que se asocia con un mayor riesgo de sufrir enfermedades cardíacas.
Variedad y nutrientes:
Controlar las porciones permite una mayor variedad en tu dieta para bajar el colesterol. Al diversificar los alimentos y las porciones, te aseguras que vas a obtener una gama completa de los nutrientes esenciales para la salud cardiovascular.
Estrategia de reducción de riesgos:
Para aquellas personas que tienen factores de riesgo para sufrir enfermedades cardiovasculares, tales como la hipertensión o la diabetes, controlar las porciones es una estrategia fundamental. Con esto puedes mantener niveles saludables de presión arterial y glucosa en sangre, lo que previene la aparición de complicaciones cardiovasculares.
¿Cuántas sesiones necesitaré?
En lo referente al número de sesiones que necesitarás para evaluar y ajustar tu dieta para bajar el colesterol puede variar según diversos factores, tales como tu situación de salud inicial, tus objetivos específicos y la respuesta de tu cuerpo a los cambios en la dieta y en el estilo de vida. Sin embargo, algunas pautas generales que podemos tener en cuenta son:
Inicialmente:
Tras implementar cambios en tu dieta y en tu estilo de vida, puedes realizar una
primera revisión. En esta revisión inicial, se pueden realizar pruebas de laboratorio para evaluar la efectividad y ajustar el plan en caso de que sea necesario.
Trimestralmente o semanalmente:
Establecido un plan que sea efectivo para ti, las revisiones regulares puedes ser
programadas de forma trimestral o semanal. Estas revisiones permitirán evaluar el progreso a lo largo del tiempo y realizar ajustes según sea necesario para mantener o para mejorar los resultados.
Ajustes en el tratamiento o en la medicación:
En caso de que estés tomando medicación para reducir el colesterol, estas revisiones pueden ser más frecuentes, más concretamente al inicio del tratamiento. En ellas, se podrá ajustar la dosis o cambiar la medicación según vaya respondiendo tu cuerpo y los resultados obtenidos de las pruebas.
Factores de riesgo adicionales:
En caso de que padezcas algún factor de riesgo adicional para desarrollar alguna posible enfermedad cardiovascular, tales como la diabetes, la hipertensión o tengas antecedentes familiares de problemas cardíacos es posible que precises de revisiones más frecuentes para monitorear de cerca tu salud cardiovascular.
Adaptaciones individuales:
En cuanto a la frecuencia de las sesiones de revisión deben de adaptarse a tu progreso individual y a tus necesidades. En caso de que experimentes cambios en tu salud o en tu estilo de vida, puede ser de gran utilidad programar revisiones adicionales para garantizar una atención personalizada.
¿Cuando comenzaré a ver los resultados?
Es esencial comprender que esta transformación cardiovascular lleva tiempo y puede variar según diversos factores individuales. Sin embargo, unos aspectos generales serían:
Primeras semanas:
En las primeras semanas con esta dieta, puedes apreciar un aumento de la energía y una sensación general de bienestar. Sin embargo, la reducción del colesterol, suele llevar más tiempo.
Después de un mes:
Tras llegar a la barrera del mes, es posible que puedas notar mejoría en tu resistencia cardiovascular. Lo puedes apreciar realizando actividades físicas con menos esfuerzo y sentir que tu capacidad pulmonar ha mejorado.
De 3 a 6 meses:
En este período, los cambios en la composición corporal suelen empezar a ser más
evidentes, más concretamente en aquellos casos donde haiga una combinación de dieta y ejercicio. Es posible que observes una pérdida de peso gradual, así como una disminución de la grasa corporal.
De 6 meses a un año:
En este período, es probable que veas cambios importantes. Los niveles de colesterol pueden comenzar a estabilizarse, la presión arterial puede mejorar e incluso puedes apreciar una mayor eficiencia en la función cardíaca.
A largo plazo:
A medida que vas avanzando es posible que veas otros beneficios. La reducción del riesgo de enfermedades cardíacas, la mejora continua de la resistencia cardiovascular y la fortaleza general del corazón son mucho más evidentes.
Factores individuales que influyen en los resultados:
Genética:
La respuesta al ejercicio y la dieta puede variar según la genética de las personas.
Algunas personas pueden experimentar cambios mucho más rápidos que otras.
Edad:
Por lo general, los resultados suelen ser más evidentes en las personas más jóvenes, sin embargo, la adopción de hábitos saludables puede tener beneficios a cualquier edad.
Estado de salud inicial:
Aquellas personas que ya desde un inicio tienen un estado de salud complicado,
pueden apreciar cambios de forma más notable en un período de tiempo más corto, más concretamente en la pérdida de peso inicial.
¿Es posible volver a tener una subida de colesterol?
La posibilidad de experimentar una subida de colesterol nuevamente existe, por lo que es importante entender los factores que pueden influir en este proceso para tomar medidas para evitarlo.
Dieta y estilo de vida:
El principal factor que puede influir en una subida de colesterol es la falta de
constancia en la dieta y en un estilo de vida saludable. Si vuelves a hábitos alimenticios poco saludables o dejar de realizar actividad física de forma regular, es probable que los niveles de colesterol aumenten nuevamente.
Cambios en los hábitos alimenticios:
Incorporar alimentos ricos en grasas saturadas y trans, o una mayor ingesta de azúcar y de alimentos procesados, puede ocasionar un aumento de los niveles de colesterol LDL. Mantener una dieta equilibrada y rica en alimentos cardiosaludables resulta esencial para prevenir las subidas de colesterol no deseadas.
Falta de ejercicio:
La inactividad física también contribuye al aumento de los niveles de colesterol LDL y de los triglicéridos, mientras que la realización de actividad física de forma regular ayuda a mantener estos niveles saludables. La falta de ejercicio puede ser un factor clave en una subida del colesterol.
Factores genéticos:
La genética cumple con un papel en la gestión del colesterol. En caso de que tengan algún antecedente familiar de problemas de colesterol elevado, es crucial mantener una vigilancia constante, así como adoptar medidas para prevenirlo.
Cambios en el peso corporal:
El aumento de peso, más concretamente el aumento de la grasa abdominal, está vinculado a los cambios en los niveles de colesterol. Mantener un peso saludable mediante la dieta y el ejercicio resulta esencial para prevenir las fluctuaciones no deseadas en el perfil lipídico.
¿Debo tomar suplementos?
Añadir suplementos a un menú para reducir el colesterol puede ser una consideración importante para gestionar la salud cardiovascular. Algunos suplementos pueden ser beneficios, sin embargo, la clave está en entender las necesidades individuales y en complementarlos con una dieta equilibrada.
Omega-3 y ácidos grasos esenciales:
Los suplementos de omega-3, que incluyen ácidos grasos tales como el EPA y el DHA, han demostrado aportar beneficios para la salud cardiovascular.
Reduciendo los niveles de triglicéridos, mejorando la función arterial y reduciendo la inflamación.
Esteroides vegetales:
Los esteroides vegetales son compuestos que se encuentran en alimentos de origen vegetal y que ayudan a reducir la absorción del colesterol en el intestino. Estos suplementos pueden ser útiles para aquellas personas que tienen dificultades para obtener suficiente a través de la dieta.
¿Me puedo saltar la dieta algún día?
Aunque en muchos casos la respuesta es sí, hay matices, y es que es necesario que se aborde con moderación y según el contexto. La flexibilidad nutricional puede ser clave para mantener una dieta a largo plazo. Algunas consideraciones importantes son:
Moderación como clave:
Aunque en ocasiones te pueden permitir tomar alimentos indulgentes, la moderación es fundamental. Planificar y disfrutar de forma consciente de tus elecciones alimenticias puede ayudarte a mantener el equilibrio.
Planificación estratégica:
Si sabes que tendrás una ocasión especial, puedes planificar con antelación. Ajusta tus comidas en los días previos y posteriores priorizando alimentos saludables y equilibrados para compensar.
Mantén la perspectiva a largo plazo:
Un día fuera de tu rutina dietética no tendrá un gran impacto en tus objetivos si mantienes una perspectiva a largo plazo. La coherencia a largo tiempo es más importante que los eventos aislados.
¿Cómo sabré si he bajado mi colesterol?
La reducción del colesterol con una dieta es un logro para un corazón más saludable. Para evaluar el progreso, es importante conocer las herramientas disponibles para comprender los cambios en los niveles de colesterol. Algunas formas de conocer estos cambios son:
Analíticas de sangre:
Estas analíticas, son la herramienta más precisa para evaluar los niveles de colesterol en la sangre. Con el resultado de la analítica puedes medir el colesterol LDL, el colesterol HDL y los triglicéridos. Tu médico podrá solicitar estas analíticas de forma regular y comparar los resultados a lo largo del tiempo.
Control de peso:
La pérdida de peso, está relacionada con la reducción del colesterol. La grasa corporal adicional, más concretamente la situada alrededor de la cintura, puede contribuir a tener unos niveles elevados de colesterol.
Otros marcadores:
La reducción del colesterol también se asocia a mejoras en otros aspectos, como la reducción de la presión arterial y la estabilización de los niveles de azúcar en sangre. Estos cambios son signos de un progreso positivo.
Los mejores alimentos para bajar el colesterol
Avenas y cereales integrales:
La avena, con su textura y los cereales integrales, con su variedad de sabores, son
alimentos ricos en fibra soluble que actúan como esponjas que absorben el colesterol LDL, reduciendo así los niveles perjudiciales. Además, posibilita la liberación de energía sostenible, manteniéndote vitalizado a lo largo del día.
Aceite de oliva virgen extra:
El AOVE, es conocido como “oro líquido”, no solo aporta profundidad de sabor a tus platos, sino que también es rico en grasas monoinsaturadas. Estas grasas son saludables y contribuyen a reducir el colesterol LDL, además de fomentar la presencia del colesterol HDL (el colesterol bueno).
Pescado graso:
Manjares como el salmón o la trucha, son ricos en ácidos grasos omega-3, aliados no solo a gratificar tu paladar sino también en la disminución de los niveles de colesterol. Una auténtica explosión de sabor y bienestar cardiovascular en cada bocado.
Frutas y verduras:
Las frutas y verduras, contienen antioxidantes y fibra, que son esenciales en nuestra dieta. Ya no solo reducen el riesgo de enfermedades cardiovasculares, sino que aportan una frescura vibrante en tu alimentación diaria. Por ello, se recomienda sobre todo consumir manzanas, aguacates, fresas, arándanos, brócoli, espinacas y zanahorias.
Nueces y semillas:
Crujientes y sabrosas, tanto las nueces como las semillas contienen grasas saludables y antioxidantes que las convierten en opciones saludables para una buena salud cardiovascular. Más concretamente destacamos las semillas de chía, de lino y las de girasol.
Otras especialidades medicas
A continuación te presentamos otras especialidades medicas relacionadas con la dieta para bajar el colesterol que realizamos en nuestro centro de especialidades medicas en Madrid